He tenido el placer de asistir al curso Eneagramanauta de Alberto Chavarino, y aprovecho para contaros aquí mis impresiones del curso.
Eneagramanauta es una introducción al Eneagrama, una herramienta de clasificación de los temperamentos de la personalidad, que facilita el autoconocimiento y el desarrollo mediante la identificación de patrones de excelencia y desequilibrio en cada uno de dichos temperamentos.
A lo largo de este comentario iré dando mi opinión acerca de la temática del curso. Como en cualquiera de mis análisis, que no esté de acuerdo en algún matiz del curso no desmerece en absoluto el valor del curso.
Una crítica o comentario tiene que añadir el punto de vista de la persona que opina y los matices que considera relevante, de lo contrario esto sería un “este curso es la caña” y para transmitir esto bastaría con darle al “Me Gusta” en facebook. Por tanto aquí expongo mucho de mi visión personal. Pero, que quede claro, este curso es la caña.
El Eneagrama
Antes de ir a este curso no tenía mucha idea de lo que era el eneagrama. Suponía que era una herramienta esotérica para etiquetar a las personas, algo así como el horóscopo. Y siendo una persona racional, pues no tenía mucho interés en aprenderlo. Qué equivocado estaba 😀
El Eneagrama, aunque se le asumen orígenes ancestrales, realmente no tiene mucho de esotérico. Es una clasificación de los temperamentos o personalidades, es decir, es un modelo de la personalidad humana como puede ser el indicador Myer-Briggs o cualquier otro.
Lo bonito del eneagrama es que además de indicar los comportamientos y actitudes, nos muestra su origen, desvelando por qué las personas se comportan como se comportan en base a sus virtudes y sus defectos, a sus deseos y temores más profundos. Los valores y las creencias de cada temperamento son lo que generan su comportamiento.
De esta forma podemos comprender las distintas energías y conductas de los demás en función a sus valores y creencias (tu mundo interior genera tu mundo exterior). Te ayuda a comprenderte a ti mismo y a los demás.
El eneagrama comienza modelando los temperamentos en base a 3 áreas:
- * el área del instinto, que describe cómo influimos en el mundo, y cuyas emociones principales son la tristeza o la ira por el estado del mundo.
- * el área de las emociones, que describe cómo conectamos con nuestros sentimientos, cómo nos vemos a nosotros mismos y de dónde adquirimos nuestra autoestima y validación, cuyas emociones principal son la vergüenza o la rabia por aquellas facetas de nuestra identidad que no nos gustan.
- * el área del pensamiento que describe la relación entre nuestro pensamiento y nuestras acciones, y cuyas emociones principales son el miedo o la ansiedad.
Y en cada una de estas 3 áreas de la vida, cuando existe un desequilibrio la persona puede comportarse de tres formas:
- * amplificando sus reacciones en dicha área
- * reduciéndolas, atenuándolas o controlándolas
- * bloqueándolas, anulándolas o desconectando de ellas
Como tenemos 3 diferentes actitudes para 3 áreas de la vida, nos da 3×3 = 9 tipos de temperamentos, y de ahí el nombre del eneagrama:
Por ejemplo: los tipos 5-6-7 corresponden al área de pensamiento vs acción.
La persona que amplifica sus reacciones en este área tenderá a la hiperactividad, a la extroversión, a pensar menos y a hacer muchas cosas. Es el tipo 7: el Entusiasta, el alma de la fiesta.
En cambio la persona que atenúa sus reacciones tenderá a la hipoactividad, a la introversión, a pensar menos y a actuar más. Es el tipo 6: el Investigador, el pensador profundo.
Y finalmente hay personas que bloquean la relación pensamiento-acción: estas personas son muy leales y cumplidoras, pero les cuesta tomar decisiones y pasar a la acción. Sería el tipo 6: el Leal, el gran amigo.
Cuando un temperamento está equilibrado saca lo mejor de sí mismo: por ejemplo el tipo 1 es un temperamento de gran serenidad, el 8 es un líder protector, el 3 es auténtico y sincero, el 7 es alegre y divertido, etc.
En cambio cuando un temperamento está desequilibrado, pues reacciona frente a sus miedos más profundos y ahí aparecen sus defectos: el 1 se vuelve cascarrabias, el 8 es un sargento, el 3 un guarro ansioso, el 7 un gambitero, y así.
Conferenciantes
Alberto Chavarino
Alberto es el diseñador y principal ponente del curso. Conduce el taller desde la introducción hilvanando las distintas secciones, presentando a los conferenciantes invitados e indicando la realización de los distintos ejercicios.
Personalmente conozco a Alberto desde hace ya un tiempo, y he visto su evolución como conferenciante. Está mucho más suelto y se mueve con comodidad delante de una audiencia, logrando un curso bastante dinámico y divertido.
Alberto va explicando los distintos temperamentos del eneagrama y presentando al resto de ponentes, coordinando también los distintos ejercicios y en general haciendo de magnífico maestro de ceremonias y director de orquesta.
Es una persona muy auténtica (como vimos cuando a él también le tocó enfrentarse a su Ego en un determinado momento del curso) y después de verle trabajar en varias ocasiones me atrevo a decir que cualquier cosa que Alberto prepare estará cuidada en cada detalle y realizada con la mayor de las entregas.
Alberto contándonos sus eneagramicosas
David Serrato
Me ha encantado conocer a David, su historia de superación es inspiradora y su filosofía es bastante parecida a la mía. David promueve intensamente la responsabilidad personal, es decir, tomar las responsabilidad de nuestras acciones y dejar de ser espectadores para convertirnos en los protagonistas de nuestra propia vida.
Con una entretenida metáfora felina, David nos cuenta cómo la mayoría de las personas eligen el papel de víctima, para no tener que ser responsables de las cosas que les pasan. Y las razones por las que tenemos miedo de responsabilizarnos de nuestra propia vida.
Lógicamente, a veces los resultados dependen de nosotros y otras veces no. Aquí difieren un poquito las visiones de David y mía. David promueve el centrarse en el camino, en el proceso, para así tener el éxito garantizado (relacionado con el concepto de “Meta bajo tu Control” de la planificación de objetivos). En mi opinión es una muy buena filosofía, y estoy de acuerdo en que lo que finalmente te hace feliz es ser congruente con tus valores, es decir vivir con integridad.
Pero por otro lado, opino que centrarse en el camino puede hacer que a veces te pierdas ciertos resultados interesantes por no querer cambiar tu forma de hacer las cosas, el “yo es que soy así”, “yo quiero que me quieran como soy”, etc. Opino que a veces puede resultar interesante focalizarse en el resultado, siempre y cuando no comprometas tu integridad y tus valores. En un próximo artículo expondré mi modelo de Proceso vs Resultado a ver qué os parece.
David también nos habló el domingo y nos contó la historia de su enfrentamiento con el cáncer. Me gustó mucho su visión de cómo la vida nos avisa de diferentes formas de que estamos aplicando nuestra energía en el camino incorrecto, de cómo el cuerpo nos avisa y tenemos que escucharle (una gran verdad: toda energía que nos desequilibra y no canalizamos, la somatizamos), y de cómo podemos recuperar nuestro equilibrio, nuestro centro, mediante la relajación en las diferentes áreas de nuestra vida.
Te recomiendo que visites la web de David Serrato para aprender más de su filosofía.
David explicándonos la poderosa técnica del OSO IDIOTA
Ernesto Frutos
Conocimos a Ernesto el sábado en la cena, y ya desde el primer momento nos dimos cuenta de que teníamos delante a una persona que transmite una inmensa paz y serenidad.
Ernesto ya ha recorrido un gran camino dentro del desarrollo personal, y eso se nota en cada una de sus palabras, sus gestos y sus acciones.
Su charla estuvo más orientada al nivel de espiritualidad. Realmente, nuestros pensamientos, creencias, mapas del mundo, incluso nuestra identidad son unos intangibles, en el sentido de que no son más que procesos de nuestra mente.
Cuando decimos “yo soy” nos estamos identificando con diferentes partes de nuestra vida, como nuestro nombre, nuestro trabajo, nuestras posesiones o incluso nuestros pensamientos. Este proceso de identificación, el buscar definir nuestra identidad en función de estas circunstancias es realmente un autoengaño. Y ese autoengaño nos lleva al sufrimiento.
A mí personalmente me llegó mucho la filosofía de Ernesto, en el sentido en que transmite una espiritualidad que me resulta interesante y atrayente en este punto de mi vida. El apego a las circunstancias de nuestra vida, incluida nuestra propia identidad – sea como sea como la definamos – y nuestros propios procesos mentales, no es más que una forma de cubrir necesidades internas. Cualquier apego conlleva que la impermanencia de aquello a lo que nos apegamos nos cause sufrimiento.
Y ya sabéis, el dolor es inevitable pero el sufrimiento es opcional.
Quizás en esta parte es donde la audiencia se perdió un poco. Es un concepto de la espiritualidad más relacionado con el budismo, que a mí personalmente me resuena mucho más que otros canales de espiritualidad como pueda ser la religión.
Pero también hay que reconocer que los conceptos espirituales les chirrían más a la gente, sobre todo a las personas que aún están intentando desarrollarse, encontrarse a sí mismos y pagar la hipoteca a fin de mes.
De alguna forma la charla de Ernesto daba un salto lógico grande entre los niveles de creencias/identidad en los que se mueve el eneagrama y el nivel de espiritualidad en el que nos damos cuenta de que el apego a dichas creencias e identidades es otro autoengaño más. A mí realmente me encantó su charla, aunque posiblemente una transición más suave entre unos conceptos y otros podría ayudar a una audiencia más variada a conectar con el mensaje tan importante y liberador como es el desapego.
Y me ha dicho un pajarito que, como buen malagueño,
cuenta los chistes que te partes..
Salvador Carrión
Salvador fue el último ponente invitado y nos dió una breve charla con algunas pinceladas sobre su visión del desarrollo personal, haciendo especial énfasis en el tema de lo peligroso de desarrollarnos a través del Ego en lugar de buscar nuestra Esencia.
Es la primera vez que veía a Salvador Carrión y , como buen Maestro de PNL, me pareció muy bueno contando historias y utilizando las metáforas. Su filosofía es un interesante contrapunto al resto del curso.
¿Qué me ha aportado este curso?
Al final lo importante de los cursos es aquello que aprendes: ¿qué es lo que te llevas?. Y esto lógicamente es diferente para cada uno. A mí me ha resultado extremadamente provechoso desde el minuto cero. Tu experiencia puede variar.
Como yo no conocía nada del Eneagrama, mi primera sorpresa vino cuando hice el test en el metro yendo hacia el curso. Uno de los tests me salió considerablemente alto, parecía indicar que yo encajaba en uno de los temperamentos al 90%. Luego en otro encajaba al 80%, y los demás ya valores menos extremos. Esto despertó mi curiosidad por saber qué podría revelarme esta tipología.
(Por cierto, durante el curso descubrí que bastantes de los asistentes ¡no habían hecho los deberes! Es una lástima porque así se pierde parte del autodescubrimiento, y entonces lo que queda es una colección de arquetipos que te puedes creer o dejar de creer. Si vais al Eneagramanauta os recomiendo que hagáis el test completo, os ayudará a aprovechar el curso.)
Y así durante el curso estuve pendiente de que Alberto explicara los temperamentos, para ver por qué me salía tanta afinidad con uno de ellos. Cuando explicó el tipo 3, me volví a quedar sorprendido de lo acertadamente que reflejaba mis miedos e inseguridades, así como mis capacidades, ventajas y valores, pero sobre todo, la actitud con la que me enfrento al mundo y a los problemas.
Es más, hasta las virtudes y defectos de los otros temperamentos que adquiere el tipo 3 cuando está equilibrado o desequilibrado, correspondían como un guante con mis cambios emocionales cuando estoy centrado y cuando paso por una mala época.
Ahora, desde luego el Eneagrama no es la única forma de descubrir tu temperamento. En mi caso particular he trabajado mucho en diferentes niveles con el factor limitante de una personalidad exigente consigo misma, lo que se denomina la Vergüenza Tóxica, y que se puede trabajar con múltiples disciplinas, que es precisamente lo que hago en el taller de Tu Luz Interior.
Lo que me pareció fascinante es que todo eso que yo había estudiado a través de otras vertientes de psicología, el eneagrama te lo muestra delante tuya como un mapa de las personalidades. Por ejemplo una persona con vergüenza tóxica cuando se equilibra tiende a la apatía, una vez que lo sabes resulta lógico: alguien que se frustra cuando no consigue las cosas, y esa frustración le genera mucho dolor, si le salen varias cosas mal deja de hacer cosas para así no frustrarse.
El eneagrama te muestra esto de forma gráfica a través de la interconexión entre los temperamentos: el tipo 3, cuando está desequilibrado, degenera en el defecto del 9, que es la apatía o desidia. Lo que yo he tardado bastante tiempo en encontrar a través de otros caminos, el eneagrama te lo muestra con un simple gráfico con flechas de interconexión. Me pareció de una elegancia y potencia asombrosas.
con David Serrato que es un tío la mar de majete
Y es que si lo piensas bien, el eneagrama tiene que funcionar necesariamente. No es una clasificación arbitraria, sino que es dividir nuestras interacciones en tres grandes áreas: nuestra interacción con nuestras emociones, nuestra interacción entre pensamiento y acción, y nuestra interacción con el mundo. Y para cada una de esas áreas, determinar si en caso de desequilibrio tendemos más a amplificar la interacción, a reducirla o a bloquearla. Necesariamente todas las estrategias para lidiar con las fricciones en estas interacciones tienen que estar contenidas en el eneagrama, e interrelacionarse unas con otras.
Pongamos un ejemplo más sencillo. Sabemos que hay personas que tienden más a centrarse sobre sí mismas, y otras que tienden más a focalizarse en lo externo. Las primeras personas encuentran su zona de confort en la soledad y en sus propios pensamientos, mientras que las segundas recargan las pilas en sociedad y en compañía.
Si establecemos esta dualidad y le damos un nombre como introversión-extroversión, encontraremos que hay gente totalmente introvertida, totalmente extrovertida, otros que a lo mejor el 70% del tiempo se comportan de forma extrovertida y el 30% introvertida, y también los habrá que sean 50-50, tengan estas dos energías muy equilibradas y su actitud dependa enteramente del contexto. Pero necesariamente todo el mundo se encontrará en algún punto en el continuo introversión-extroversión, aunque este punto pueda variar en mayor o menor medida en función del tiempo y las circunstancias.
Pues el eneagrama es lo mismo pero, en lugar de una dualidad, considera tres áreas básicas de la vida, donde al encontrar fricciones aparecen tres emociones básicas (tristeza/ira, vergüenza/rabia, miedo/ansiedad) y provocan tres reacciones básicas (amplificación, atenuación, anulación). Necesariamente las estrategias de una persona para gestionar la relación consigo mismo, con los demás y con su entorno aparecen contenidas en este modelo.
Así, la mayoría de nosotros según nuestras preferencias nos identificaremos más o menos con algún temperamento principal, y quizá también con algunos secundarios, el entender los rasgos de este temperamento nos ayuda a conocernos mejor a nosotros mismos, y el entender qué características de otros temperamentos nos son útiles para evolucionar, nos da un mapa para el camino de nuestro desarrollo personal.
Y también por supuesto está el caso de la persona equilibrada, aquél que no tiene preferencia por una estrategia u otra, y que decide en cada momento lo más conveniente dependiendo del contexto y las circunstancias, teniendo así acceso a todas las capacidades de los distintos temperamentos.
Distinciones
Me gustaría acabar con dos distinciones de mi cosecha, a ver qué os parecen:
* Etiquetas vs Arquetipos: en muchos modelos de desarrollo personal, incluído este, se utilizan una serie de distinciones. Por ejemplo en PNL hablamos de Visual, Auditivo, Kinestésico para referirnos a los sistemas representacionales preferidos por la persona. En Eneagrama tenemos al Desafiador, al Ayudador, al Entusiasta, etc. para referirnos a los temperamentos con los que la persona reacciona en las áreas de la vida.
Este tipo de distinciones resultan útiles si las consideramos arquetipos más que etiquetas. ¿Cuál es la diferencia? Si decimos “Manolo es un Individualista”, pues estamos cogiendo un canasto grandote etiquetado como “Individualistas” y estamos metiendo a Manolo dentro. Es una etiqueta. Si Manolo tiene la etiqueta X, no puede ser la Y. Si decimos “Pepe es visual”, ¿quiere decir que ya no puede ser auditivo?
En mi opinión las tipologías son más útiles consideradas como arquetipos. Un arquetipo es un patrón o modelo ideal (ejemplos de arquetipos: el niño travieso, el abuelo cascarrabias, etc). Si consideras un arquetipo como un patrón o modelo, lo puedes ver como una energía, y puede fluir y combinarse. Por ejemplo puedes tener mucho de visual, bastante de auditivo y poco de kinestéisico. Si en lugar de decir “yo soy un Desafiador” dices “yo tengo bastante de Desafiador y algo de Entusiasta” estás considerando energías dinámicas, que fluyen y se combinan, más que como una etiqueta que te cataloga dentro de una categoría, y si eres eso ya no puedes ser otra cosa.
* El Ego: en este curso se le ha dado una gran importancia al Ego como enemigo de la Esencia, y se ha hecho bastante hincapié en anularlo y tenerlo bajo control. Mi opinión difiere un poco de este paradigma. Cuando hice el Trainer en PNL con Robert Dilts (NLPU Trainer’s Training) aprendí que el Ego tiene una gran utilidad. Sin ir más lejos, el Ego es el que paga las facturas. Una persona orientada totalmente a su Esencia y que haga caso omiso a su Ego será una persona extremadamente auténtica, pero a lo mejor no llega a pagar la hipoteca. Desde mi visión del mundo, Ego y Esencia tienen que estar equilibrados.
Lo que sí que es totalmente cierto es que el Ego es muy bicho, y como te dejes llevar por él te pierdes. Vivimos en una sociedad de demasiado Ego, y es muy conveniente aprender a identificar sus engaños y a tenerlo bajo control, cosa que aprenderás en el curso del Eneagramanauta.
Ficha técnica
Eneagramanauta
Formato: Taller de Fin de Semana
Duración: 2 días mañana y tarde, 18 horas aprox.
Conferenciantes: Alberto Chavarino, David Serrato, Ernesto Frutos, Salvador Carrión
Edición asistida: 17-18 de Noviembre de 2012
Próxima edición: verano 2013
Valoración: 5/5 – Excelente
¿Lo recomiendo?: sí, encarecidamente.
Lo más impactante: los conferenciantes, lo atinado que aplican los temperamentos del eneagrama a muchas personas.
Lo mejorable: realmente nada. Se podrían pulir algunos detalles menores para próximas ediciones, pero el curso está bien como está.
Para quién es: para los que quieran conocerse a sí mismos.
Para quién no es: para los que ya tengan un conocimiento avanzado del eneagrama, puesto que se trata de una introducción. Para los que ya lo conozcan y lo quieran aplicar, Alberto dispone de grupos de coaching con eneagrama.
Si quieres comentar algo, dejar tu opinión del curso, o dejar un enlace a tu propio análisis de este curso, escríbenos un comentario abajo.
Enhorabuena y gracias por este fantástico resumen.