Hace unas semanas estaba en el gimnasio cuando un joven se acercó a mí justo después de haber terminado mis sentadillas. Me dijo que era un principiante en el gimnasio y me preguntó sobre la mejor manera de progresar para ser capaz de levantar una impresionante cantidad de peso.
“Oh, esto es fácil — simplemente continúa con tu programa 5×5 y…”
Me detuve.
“Lo siento, me he equivocado al decirlo. Es simple, no fácil. Simplemente continúa siguiendo tu programa con perseverancia, supérate a ti mismo, y ocurrirán cosas buenas”.
Me alejé de la interacción meditando sobre lo que acababa de decir. Mi corrección solo fue ligeramente diferente a mi afirmación original, pero creo que evocaba un estado mental completamente diferente.
Los seres humanos estamos programados para seguir el camino de menor resistencia, y existen pocas cosas cuyo alcance merezca la pena que sean realmente fáciles de hacer. Hay claramente dos áreas a considerar cuando evaluamos el método de conseguir una meta. Las preguntas que te harás a ti mismo son:
¿Es fácil o difícil?
¿Es simple o complicado?
Fácil vs Difícil describe la distancia hasta la meta. Algo es fácil si es tangible, inmediato y requiere poco esfuerzo. Las cosas difíciles requieren esfuerzo sostenido y van contra nuestro natural estado de inercia. Existen pocas cosas “Fáciles” de hacer que te vayan a distanciar de la persona media, porque si fuera fácil todo el mundo lo haría.
El otro área, Simple vs Complicado, describe la complejidad de la solución. He descubierto que mis mejores logros vinieron de hábitos relativamente repetibles y fácilmente comunicados. Las cosas complicadas requieren más explicación, más matices y son más fáciles de olvidar debido a los múltiples pasos que implican.
Cuando estás valorando diferentes maneras de llegar a una meta, así es como puedes ver la combinación de estos factores:
Fácil y Simple
Si tu vida fuera una cuenta de banco, las situaciones Fácil-Simple son los reintegros que, con el paso del tiempo, te dejan en la ruina.
Es simple y fácil conseguir comida basura — simplemente dirígete a un puesto con el dinero en la mano, y en cuestión de minutos estarás comiendo tu delicioso veneno. Es fácil y simple jugar a videojuegos, o vagar por sitios web de citas online desde la comodidad de tu casa.
Estas soluciones son accesibles y requieren poca dedicación. La excepción aquí es la solución directa para arreglar un problema menor — tomar un suplemento de zinc para compensar una deficiencia, por ejemplo. (Sin embargo, cualquier cambio a gran escala que se anuncie como Simple y Fácil es probablemente falso).
Fácil y Complicado
La sabiduría para reconocer estas engañosas situaciones es de trascendental importancia. Las situaciones Fácil-Complicado a menudo contienen un buen número de detalles innecesarios, pero que prometen resultados fáciles y seguros sin echarle mucho trabajo.
En otras palabras, este es el dominio de los gurús del marketing. Esquemas piramidales, ejercicios disparatados y suplementos de entrenamiento vienen a la mente como cosas cuyos mecanismos son difíciles de explicar pero que supuestamente requieren de escasas cantidades de esfuerzo para dar resultado.
La complejidad de estas soluciones se centra a menudo en distraerte de ver la solución real y difícil (pero simple).
Difícil y Complicado
Algunas cosas que merece la pena hacer caen en esta categoría —alcanzar la maestría, más que la competencia, en un área es bastante Difícil-Complicado. Sin embargo, para la mayoría de las metas en la vida, una solución en este cuadrante significa que no estás tomando el camino más eficiente hacia tu meta.
Lo que nos lleva a…
Difícil y Simple
Estas son las soluciones que deberías buscar a la mayoría de tus problemas. Vivimos en un mundo donde la mayoría de las metas tienen un patrón establecido para el éxito, y a menudo estos pasos se comunican fácilmente en unas cuantas frases.
No obstante, la implementación del consejo requerirá una dedicación, sudor y perseverancia que pocos están dispuestos a realizar.
¿Quieres aumentar tu masa muscular? ¿Comenzar un negocio? ¿Mejorar tu dieta? ¿Ganar más dinero?
Todas estas cosas tienen pasos bastante simples, pero requieren de un significativo esfuerzo para ejecutarse a largo plazo. Los indicadores clave para estos métodos son que sean sostenibles y fáciles de resumir, pero has de luchar contra tu inercia interna para realizarlos a largo plazo. También tienden a mostrar pequeños retornos pero en aumento que ayudan a verificar que merecen la pena.
Existen excepciones, pero para la mayoría de las metas en tu vida, irás mejor encaminado siguiendo los métodos Difíciles y Simples de realizar progresos.
Artículo Original: Two Essential Questions You Must Answer Before Accomplishing Anything.
Traducción: Luis Bermer
Yo también soy de los que piensan que existen esos cuatro cuadrantes bien diferenciados, y el cuadrante que destacas, el último es el deberíamos seguir.
Cada uno de los cuadrantes tiene una relación coste/satisfacción diferente, eso es obvio. Nadie hace alarde ni se siente orgulloso de sí mismo por cumplir un objetivo simple y fácil, mientras que los tres otros cuadrantes, por un lado o por otro, aportan algo y tienen un mérito.
Esta relación que aquí indicas está íntimamente ligada a otra mucho más raída: excelencia y perseverancia.
Mientras que los objetivos simples y difíciles se pueden alcanzar únicamente con perseverancia. Los difíciles y complejos además necesitan de excelencia. Antes de afrontar un objetivo que sea complejo y difícil deberías de preguntarse si ese objetivo está dentro de tu campo de habilidades. Si podrías abordarlo.
Yo soy de los que piensan que todo se puede hacer muy bien sólo con perseverancia y trabajo, pero que para ser excelente además tienes que tener un extra innato relacionado con tus capacidades. Pero también os digo, todos tenemos capacidades excelentes innatas para hacer muchas cosas, por lo que no me vale como excusa en absoluto.
Ahora estoy corriendo de nuevo, intentando batir unas marcas que para mí son difíciles. Me cuesta bastante bajar en distancia largas de los 6min/km y estoy entrenando para ello (y sufriendo mi rodilla también). Tengo amigos que sin correr en su vida se hacían 10km bajando de los 5:30 sin esfuerzo alguno. Estas personas tienen unas cualidades excelentes para el objetivo que yo me he propuesto.
Si entrenasen igual de duro que yo (que bueno, no es tanto jaja) serían capaces de competir a buen nivel algo que para mi es imposible.
En fin que me voy por las ramas, pero creo que me he explicado :P. Igual algún día escribo sobre esto de forma algo más detallada. 🙂
Muchas gracias por tu comentario Samuel!
Me parece muy acertado, el artículo se centra en el cuadrante Simple-Difícil que en mi opinión es donde están las ganancias más importantes y fundamentales por las que debes empezar cuando quieres lograr un objetivo.
Por ejemplo para bajar de peso, antes de ponerte a programar una nutrición de deportista, quizás sea útil quitarte de carbohidratos de alto índice glucémico, ¡pero es difícil porque están por todas partes y muchos generan adicción o deseo!
Yo ha habido veces que he ido a comer o cenar con gente y era prácticamente imposible no pedir nada que no tuviese harina, patatas o arroz. Por no hablar de que al principio de quitarte de carbohidratos simples, te entran todo el rato ganas de zamparte una pizza familiar tú solo (afortunadamente con el tiempo se pasa y te acostumbras).
Pero claro, cuando llegas a ciertos niveles de excelencia tienes que dar un salto de nivel de complejidad. La nutrición de deportistas de élite se puede complicar hasta niveles insospechados:
http://www.amazon.com/Performance-Nutrition-Applying-Science-Nutrient/dp/0736079459
Luego aparte, parece que la grandeza lo que realmente requiere es dedicación, dedicación, y más dedicación. Parece ser que el talento natural está sobrevalorado, y no es ni de lejos tan importante como se creía:
http://www.amazon.com/Talent-Overrated-Separates-World-Class-Performers/dp/1591842948/
Esto daría para investigarlo a fondo y escribir largo y tendido sobre ello 🙂
Muchas gracias por tu estupendo comentario Samuel, siempre es un placer tenerte por aquí.
El Talento innato está ahí. O las cualidades innatas, llamémosle como queramos. Que la excelencia viene con trabajo y sacrificio, obvio. Sólo con talento no consigues grandes hitos (y posiblemente solo con dedicación sí lo hagas) pero hay personas que son mejores que otras en algunas tareas.
También el entorno donde creces es importante para muchas de las habilidades que decimos (falsamente) que son innatas (habilidades sociales, por ejemplo). Pero muchas son objetivas: hay gente que gana peso con mayor facilidad. O si lo ponemos en el caso peor, puedes tener una enfermedad/lesión que sea un hándicap (por ejemplo, en mi caso, al tener los pies planos hace que mi postura al correr sea mala y tenga que corregirla). Incluso hay factores externos que influyen mucho cuando quieres alcanzar la excelencia, como los recursos económicos para, por ejemplo, entrenar en el lugar adecuado.
Yo no creo en la igualdad. No creo que todo el mundo tenga las mismas posibilidades de alcanzar todas las cosas. Me parece fatal que se grite a los cuatro vientos que todos somos iguales y que todos tenemos las mismas oportunidades. Hay gente con más facilidad para unas y gente con más facilidad para otras. Y hay gente con más oportunidades y gente con menos. Pero eso no es excusa, son pequeños factores que en influyen pero no tienen porqué ser deterministas.
Por eso los retos simples son los mejores para empezar, porque los factores a tener en cuenta son muchos menos, ¡de ahí su simpleza! Dependes principalmente de ti y de
tus cojonestu fuerza de voluntad y ganas. Y en eso sí que dependemos 100% de nosotros.La energía está allí donde radica el interés 😉
Muy interesante, este va a favoritos, como muchos de tus artículos 😀
Muchas gracias Winston por la simpleza de esta reflexión…
Para sacar punta,
Un abrazo